Ingredientes:
- 1 morcilla de arroz (unos 250 g).
- 4 huevos grandes.
- 4-6 pimientos del piquillo en conserva, escurridos.
- 1 diente de ajo pequeño.
- 4-6 rebanadas de pan rústico.
- 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra.
- sal y pimienta negra recién molida.
- perejil fresco picado para decorar.
Preparación:
- Preparar los ingredientes: pica el ajo muy finamente. Corta los pimientos del piquillo en tiras. Retira la piel de la morcilla y desmenúzala con los dedos o un tenedor. Bate los huevos en un bol con una pizca de sal y pimienta.
- Tostar el pan: tuesta las rebanadas de pan en una tostadora o en una sartén con un hilito de aceite hasta que estén doradas y crujientes. Reserva.
- Saltear la base: calienta el aceite de oliva en una sartén a fuego medio. Añade el ajo picado y sofríelo durante un minuto con cuidado de que no se queme. Incorpora la morcilla desmenuzada y cocínala durante 4-5 minutos, removiendo, hasta que esté suelta y ligeramente crujiente.
- Añadir los pimientos: agrega las tiras de pimiento del piquillo a la sartén y saltea todo junto durante un par de minutos para que se integren los sabores.
- Hacer el revuelto: baja el fuego al mínimo y vierte los huevos batidos sobre la mezcla. Remueve suavemente con una espátula, arrastrando desde los bordes hacia el centro. Cocina hasta que los huevos estén cuajados pero aún cremosos y jugosos.
- Servir: reparte el revuelto caliente sobre las tostas de pan. Espolvorea un poco de perejil fresco picado por encima y sirve inmediatamente.
Consejo:
la clave de un buen revuelto es la cremosidad. Retira la sartén del fuego cuando los huevos aún parezcan un poco líquidos, ya que el calor residual terminará de cocinarlos a la perfección sin que queden secos.